Ana Medina, denunciante.
Los servicios públicos en los municipios de la región han
protagonizado todo un calvario para la ciudadanía, ya sea por las tarifas no
acordes con la calidad del servicio, o por las fallas en el mismo. En esta
ocasión, los puestos ambulantes del parque principal de Tocaima vivieron de
primera mano lo que para ellos representó una injusticia en cuanto a cobros y
prestación de esta asistencia, por lo que una de las personas que trabaja en el
sector, Ana Virginia Medina, quien se gana su sustento en su cubículo de venta,
presentó un derecho de petición ante la empresa de servicios privada en Agua de
Dios y Tocaima, ante la Central Colombiana de Aseo, para quejarse porque según
ella, están cobrándole por una limpieza que no han realizado en su sector de
trabajo.
La denuncia
Medina, como usuaria suscriptora de este servicio público
domiciliario, expuso por medio de un oficio el pasado 9 de enero la situación
en la que se ha visto envuelta, pues evidenció que le cobraron cerca de $50.000
por un servicio que ella no recibió, en el centro del municipio de Tocaima,
donde aprovecha de la afluencia de turistas y residentes para vender jugos y
comida. En dicho documento, Ana argumentó que su negocio no genera una elevada
cantidad de basura, pues ella misma recoge una pequeña bolsa de desechos al
final del día, lo cual no representa una ocupación de espacio público ni
empobrecimiento del aspecto físico del sitio. Según la denunciante, el cargo
fijo no debería ser cobrado, pues se trata de barridos que la empresa ni
siquiera realiza.
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